Lo que más nos gusto - Una escapada romántica en un entorno tranquilo y hermoso. El pueblo cercano nos ofreció una fiesta medieval en el que nos sentimos transportados en el tiempo. Además, las habitaciones amplias y bien insonorizadas nos permitieron descansar cómodamente. disfrutamos de un desayuno sorprendente con pan fresco y jugo de naranja natural.

Tuvimos una escapada romántica agradable en un entorno precioso. Sin embargo, hubieron algunos aspectos negativos que afectaron nuestra experiencia.

Nuestra estancia en este acogedor hotelito fue muy agradable. Nos alojamos en una habitación doble con dos camas y encontramos que era de tamaño normal, cómoda y limpia. Aunque no tenía minibar, no fue un problema para nosotros. El baño también era de buen tamaño y nos proporcionaron todos los accesorios necesarios para el aseo personal. Las camas eran cómodas y las almohadas mulliditas. El precio era justo y el servicio fue bueno.

Buena decoración

Buena atención en el restaurante. Ubicación muy buena.- Desayuno completo y delicioso.- Personal amable y agradable

Nada obvio.

Habitaciones limpias y amplias. Desayuno bueno y completo. Personal amable y atento. Buena ubicación para descansar y viajar en moto. Restaurante con buena comida. Decoración interior encantadora. Aire acondicionado y baño amplio.

Todo fue fantástico.

Bar-restaurante con buen desayuno y comida. Dueño y personal amable.- Habitaciones limpias y amplias.- Ubicación excelente y tranquila.- Parking cercano.- Buena insonorización.- Decoración rústica.- Cafetería-restaurante para cenar.

Nada de nada.

La ubicación es excelente, cerca de Jarandilla de la Vera, un pueblo con fiestas de fuego impresionantes. El personal es muy amable y te ayudan en todo lo que necesites. El hotel tiene encanto rural, con habitaciones cómodas y estilo rústico. Además, el aparcamiento es fácil y hay una cafetería y restaurante en el mismo edificio.

Me sentí verdaderamente mimado, no tengo ninguna pega.

disfruté mucho de mi estancia en Garganta la Olla y el Hotel Rural Carlos I superó mis expectativas. El desayuno era de buena calidad y variado, con zumo y tostadas en la mesa y buffet para el resto. La cama era muy cómoda y el baño funcional. La ubicación del hotel era perfecta para explorar la zona y el personal era amable y servicial. Recomiendo cenar en el hotel, tienen una buena carta.

el servicio de recepción y restaurante era algo lento y desorganizado. a veces había que esperar demasiado tiempo para ser atendido.

Limpieza impecable, atención amable, desayuno simple pero correcto, tostadas crujientes con zumo de naranja natural, buen café y detalle de cerezas picotas. Buena presión de agua en el baño y eficiente aire acondicionado. Ideal como campamento base para explorar la zona y excelente relación calidad-precio.

Acogedor hotel rural situado en un tranquilo pueblo en plena montaña. Destaca por su limpieza impecable y el excelente trato recibido por parte del personal. La habitación, aunque sencilla, ofrece camas cómodas con almohadas mulliditas. Además, el baño, aunque sin bidé, cuenta con los accesorios necesarios para el aseo personal. El desayuno, aunque sencillo, incluye tostadas crujientes con zumo de naranja natural y café de alta calidad. Sin embargo, el único inconveniente es que el precio puede resultar un tanto elevado.

Personal amable y atento, instalaciones limpias y renovadas. Comida calidad-precio bastante buena. Desayuno sencillo pero correcto, con tostadas crujientes y zumo de naranja natural. Baño con buena presión de agua y aire acondicionado funcionando correctamente. Habitación amplia, bonita y con suelo rústico. Ubicación ideal para explorar la Vera. 🌟

Precio calidad bueno, camas cómodas, restaurante abajo abierto, limpio, aparcamiento fácil, silencioso.

Nada, todo genial.

Habitaciones amplias y limpias, aire acondicionado, baño amplio, bien insonorizadas, desayuno sorprendente con pan tierno y zumo de naranja natural, atención amable del personal, decoración interior rústica encantadora.

No me puedo quejar de nada.

Aspectos positivos de mi estancia: Desayuno de calidad, cama cómoda, baño funcional, buena ubicación, opciones para cenar.

Es difícil recordar algo.

Nos encantó la tranquilidad y paz que se respiraban en el hotel. Además, la ubicación era perfecta para visitar los alrededores y disfrutar de la naturaleza. También disfrutamos de la comida del restaurante, especialmente de las carrilleras, que estaban deliciosas.

Había algunos aspectos negativos. La habitación tenía algunos problemas, como la falta de armario y cortinas.

Mi estancia en Hotel Rural Carlos I fue excepcional. Pasé unos días de descanso en este acogedor hotel, que se encuentra en una ubicación excelente. El personal, liderado por Javier, fue extremadamente amable y servicial. Me hicieron sentir como en casa y estuvieron dispuestos a ayudarme en todo momento. El hotel está situado en una zona tranquila, perfecta para desconectar del bullicio de la ciudad. Además, está cerca de varios lugares de interés turístico, lo que facilitó mis visitas. Las habitaciones estaban limpias y cómodas, y el desayuno ofrecido era bueno.

Por supuesto que lo recomiendo.